50 y 50 ella apostaba
Pero no sabia si las runas del tiempo
La volverían a curar
Así que lo esperó con el viento en las uñas
Semirecostada en la silueta de un sillón
Braseando en charcos de mugre
Por enésima ves
Fue a pedirle que no grite,
No tenias motivos para gritarle
Fue a mostrar sus cicatrices
Palabritas que no llaman la atención
y todo el humo se dejó caer
Haciendo cosas imposibles,
Frenó por dos segundos
Y todo..
Todo terminó.
Me gusta esta poesía que escuece, que araña, que vuela en la conciencia,discreta, por no haber sido humo.
ResponderBorrarSaludos Buho
Saludos don
ResponderBorrarDiscreta por no haber sido humo..
Vos lo dijiste, y es mas
No podrías haberlo dicho mejor
Abrazo don